Encontrados en Santiago

Me alejo del robot.

No hay forma de explicarle a un bebe que es un color.
Decirle, "mostrito: ves eso? ... ese es el azul."
Mas temprano que tarde, en lo que realmente constituye la busqueda primordial, se topara con los colores, por decir algo importante.
Es mas facil verlo con ese ejemplo, porque en una aparente deriva ocular, el humanito detendra sus dos globitos en el azul.
O el rojo o el amarillo, que se yo...
Pero lo veras ahi, inmovil, en en la volada maxima. Esa que no necesita drogas, ni cosas raras.
Solo necesita la inocencia para anclar sus ojos por un momento.

Esto es diferente, pero no puede ni debe reemplazar lo que pense que podia reemplazar.
Partio como un canal extraTVstre para contarle a seres queridos lo que era de mi.
Pero no pueden sentir lo que siento por aca. Le puedo poner musica y colores.
Pero la pantalla aguante mucho y esto no es suficiente.
Puedo estar muriendo y poner un iconito feliz. O llenar de codigos una vida en blanco y negro.
Cuando cague todo, incluido internet, el show debera continuar.
Tengo la suerte de haber construido otro nivel de realidad, my own blog story.
Pero incluso asi, me da cosa no poder determinar con precision lo que es y lo que no es.
Aunque vamos mejor.
Mas humano.





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